Las Sugababes fueron el grupo más prolífico y agudo de chicas pop británicas de los ceros. Mutya Buena, Keisha Buchanan y Siobhán Donaghy fueron contratadas a los 13 años por Ron Tom, manager de otro exitoso grupo femenino de All Saints. Cuando se lanzó su álbum debut, One Touch, en 2000, los Sugababes, que aún no habían alcanzado la mayoría de edad, eran adolescentes, más mestizos y más una respuesta chav a All Saints. Como All Saints, las Sugababes supieron armonizar sus voces y como las que supieron luchar de gran manera. Como toda banda de adolescentes que se precie, las Sugababes fueron un fenómeno creado, como dicen, “en la mesa”; un grupo “fake” como a los moralistas les encanta replicar el rock de todas las épocas. Pero, por falsos que fueran, en su fase imperial (2000-2006) fueron más reales que reales. Canciones como Run for cover (psicópata adolescente en un salto de 2 pasos), Freak like me (versión de la pieza de R&B de Adina Howard con interpolación de Gary Numan), Round (con ese desglose cuando se ralentiza durante un interminable puñado de segundos) y Push the button (trampa perfecta) no solo los golpea a ellos sino también a los hitos de la producción musical pop.
Y la dinámica tóxica dentro de la banda era más pesada que real. En la medida en que sus gerentes pudieron guiarlos de forma remota, los Sugababes permanecieron en su adolescencia fuera de control. Siobhán, de ascendencia irlandesa y char, fue la primera en unirse al equipo original del grupo. La leyenda, descrita en detalle por el terrible boletín de Popbitch, quería que los dos compañeros ocultaran una citación a la gerente y la pusieran en apuros porque no se presentaban a tiempo en el aeropuerto. Hechos de Siobhan, los Sugababes continuaron mezclando y perdiendo piezas hasta que fueron solo una marca, sin dejar nada básico. Su último disco, fechado en 2008, Peleas de gatas y focos, se tituló inevitablemente.
Entonces, ¿qué pasó con Siobhán Donaghy, quien aún fue expulsada sin edad de un exitoso grupo de chicas? La gerencia ciertamente no quería acabar con el talento que había cultivado durante años y en 2003 invirtió en su primer álbum en solitario, Revolution in me, que, sin embargo, no va a ninguna parte. Cuando Siobhán parece destinado a una carrera digna pero ciertamente carece de electricidad en las óperas o los espectáculos de talentos del West End, mira hacia atrás en 2007 con Ghosts, su segundo álbum en solitario. Ghosts es un unicornio en la escena pop de ese año que hizo que una flota pareciera los unicornios de los cuentos de hadas. No es suficiente, muchos notaron que existe. Siobhán Donaghy trabaja en sus canciones recién compuestas con James Sanger, ex productor de Dido, Mel C, Keane y U2, y la tensión entre los dos es clara: más Sanger agrega capas a la música, haciendo que el vestuario sea interesante y genial, la soprano voz. Donaghy se vuelve muy alegre y autoritario. Siobhán Donaghy y James Sanger parecen haber escuchado a muchas Kate Bush y a muchos Cocteau Twins durante la realización del álbum y, de diferentes maneras, llegaron a las mismas conclusiones a las que llegó Goldfrapp con su imaginativo álbum Seventh tree.
Ghosts es un álbum integrado pero increíblemente diverso: piezas misteriosas y dramáticas como Coming up for him o Goldfish se alternan con pequeñas piezas de teatro absurdo como 12 bar acid blues, que hablan de una aventura viajera entre rondas de diarrea y documentos perdidos. El track que da y cierra el título del álbum, con sus orientaciones electrónicas y la pista vocal grabada en el reverso, es la suma de todos los concursos de producción asociados a esta pequeña y valiosa obra maestra olvidada. La orquesta semanal NME, que reseña el álbum, escribe que Siobhán Donaghy de Ghosts escucha «Liz Frazer de Cocteau Twins interpretada por Massive Attack». El crítico puede haberse desvanecido con entusiasmo, pero una cosa es cierta: Ghosts se trata completamente de esa tradición excéntrica de la música pop británica que ocasionalmente puede liberar extraordinarios e incomprensibles unicornios en el éter.
Siobhan Donaghy
fantasmas
Parlophone, 2007